Tras la experiencia de la cera #8, la disolución en trementina (aguarrás) vuelvo al estándar, las emulsiones. El agua no huele, no es pegajosa y se evapora rápido.
De la cera #7 saqué varias ideas que hay que aplicar. Habitualmente todo son hipótesis y teorías, pocas conclusiones firmes, las que me van orientando lentamente hacia el camino adecuado.
Para esta versión pretendo los siguientes cambios:
- Aumentar la cantidad total de emulgente.
- Reducir la cantidad de sales de boro.
- Reincorporar la lecitina como emulgente, filtrada.
- Formar primero las uniones en la fase oleosa.
La lista de ingredientes inicial es la siguiente:
- 40 ml de agua.
- 10 g de cera.
- 1 g de estearina.
- 0,1 g de bórax.
- 1 g de lecitina.
- 5 gotas de azul de metileno.
Mientras pongo al agua a calentar para el baño maría, junto en el recipiente que será el final la cera, la estearina y el bórax y lo dejo apartado en frío.
Por otra parte, voy calentando el agua que pretendo agregar lentamente después.
En otro recipiente trato de fundir la lecitina, sin conseguirlo. Al menos al baño maría no se deja fundir y no quiero tostarla tampoco.
Al no fundirse la lecitina, le agrego agua y la voy removiendo, ahí si se nota que algo se deshace, muy lentamente.
Hasta quedar prácticamente disuelta la lecitina, pasa un rato largo en que me ayudo con una cucharita para remover y acelerar el proceso. Sorprende que el fluido es elástico, lo remuevo para un lado y cuando me detengo, sigue girando con su inercia, se va frenando hasta detenerse y luego empieza a girar del revés, desenroscándose. El mismo efecto sucede si lo giro al revés, no es el efecto Coriolis.
Para quitar las partículas sin disolver, utilizo un filtro de café que adquirí expresamente para ello.
La idea podía ser más o menos buena, pero el resultado no, el líquido no traspasa el filtro, la lecitina atasca sus poros.
El resultante parece una cola, muy denso y de un aspecto que aparenta pegajoso.
Pongo ya a calentar las dos fases, la acuosa lleva la lecitina y la oleosa el ácido esteárico y el bórax.
La cera y la estearina se van fundiendo lentamente y entretanto, agrego ya el azul de metileno al recipiente de agua con lecitina, pues en agua es donde es soluble el azul.
Una batida para asegurar que todo se mezcla bien en la fase oleosa, dejar el bórax bien mezclado y de paso, vigilar que no empezase alguna reacción imprevista antes de agregar el agua, que a veces hay sorpresas.
Como la lecitina disuelta en agua está muy espesa y habrá perdido abundante agua por evaporación en el proceso, le agrego más agua ya desde el principio.
Una vez todo caliente y hogéneo, tomo el agua con lecitina (azul) para irla agregando a recipiente de cera lentamente.
Mientras voy batiendo, goteo la fase acuosa en al cera para iniciar la emulsión. La elasticidad del fluido que resultó con la lecitina, causa largas gotas.
A edida que voy batiendo y agregando agua lentaente, goteando, la emulsión se va formando con el aspecto habitual, de líquido lechoso.
La emulsión va espesando al batir, igual que sucede con una mahonesa o un allioli.
Claramente necesita más agua, así que voy con otros 20 ml, goteando mientras bato.
Lo espeso que sale no había sucedido con emulsiones anteriores, algo ha cambiado esta vez.
Al emulsionador le cuesta trabajo batir esa emulsión tan viscosa.
Continúo aportando agua, ahora un poco más rápido ya porque el emulsionador muestra síntomas de fatiga y esta vez no son las pilas agotadas.
Al mezclarse con agua en mayor cantidad, forma unos grumos que no terminan de gustarme, hay que batir bien para homogeneizarlo.
Las dificultades del emulsionador, me hacen trabajar cerca de la superfície para no atascarse. Al batir aire en la mezcla, aparece la espuma que hasta ahora apenas había hecho acto de presencia, reducir la cantidad de bórax parece que ha dado resultado.
Se suelta la varilla del emulsionador y aunque la reinserto varias veces, en cuanto ha de hacer fuerza se suelta. El motor se está sobrecalentando y termina por dejar de girar.
Al sobrecalentarse el motor, ha empezado a reblandecer el cilindro de plásico que lo une con la varilla y ahí ha hecho que se soltase. Insistir solo parece haber servido para quemar el motor, el olor a barniz quemado lo delata.
A mano continuo batiendo, sin lograr que absorba el agua adicional que había agregado.
Quedan dos fases visibles, una de aspecto sólido blando y otra íquida, básicamente agua.
En la parte de aspecto sólido, calculo que hay alrededor de un 20% de cera, es principalmente agua. Esto es una novedad, lástima que el emulsionador me dejó en la estacada.
Guardo una porción de la cera emulsionada y también del resíduo acuoso por si acaso. Muestra sobre el vidrio para comparar con el squirt, no puedo dejar.
Y con el emulsionador averiado termina el experimento del día, habrá que hacer durar la cera #8 que llevo en al cadena.